Siguiendo al caballero Alonso
Quijano llegué este fin de semana a la localidad de Argamasilla de Alba, donde
fui invitada por la Asociación Aldaba a rememorar las andanzas de tan ilustre
argamasillero. Nuestro «Cervantes
tiene quien le escriba » se paseó buscando las estatuas donde poder
posar mejor, incluso llegó a la Casa de Medrano, en cuya cueva estuvo preso Miguel
de Cervantes. Allí quedó el recuerdo de veinte autores, dos coordinadoras y un
editor que se unieron en una feliz batalla por las letras, la de realizar una
antología solidaria en el centenario de la muerte de Cervantes.
Cueva de Medrano |
En el acto, en la Casa de Medrano, junto a Jesús Díez de la Asociación Aldaba. |
Comimos gachas, migas, pisto y galianos, quedándonos con la ganas de
volver a ese lugar tan hospitalario. A partir de ahora yo sí que voy a decir
que estuve en un lugar de la Mancha de cuyo nombre sí quiero acordarme.
Gracias a la Asociación Aldaba, en especial a Jesús Díez quien tuvo la
osadía de comunicar conmigo, a las dos María José, a Pepe y esposa. También a
los representantes municipales, al concejal de cultura José Antonio Navarro y a
Sonia. Disculpad si no recuerdo todos los nombres, pero que fueron amigos de
los buenos en un lugar que quizás, quién sabe, en otro tiempo pasado, fue la
cuna de algún Molina de mi familia.